Hace poco más de un año que dedique mi primer artículo a USAIN BOLT (es un nombre que hay que escribir con mayúsculas). Me anime a ello tras sus hazañas en las olimpiadas de Beijín, y mi anhelo hacia el atletismo. Ver como un atleta se sale del común, y obtiene además unos resultados más que sorprendentes. Y un año después, ante el acoso de los atletas de EEUU, repite los mismos logros con resultados más sorprendentes aún.
Para cualquiera que entienda un poco de atletismo, vera en sus salidas, arrancadas y periodo de aceleración, la diferencia con respecto al año pasado, y la clave del porque un año más tarde ha sido capaz de rebajar sus propios records. Sin embargo en el caso de USAIN BOLT creo que toma fuerza su actitud ante cada carrera. En ese instante que precede la salida, cuando todos los atletas están dispuestos a modo de paredón, mientras una cámara los apunta dando sus cifras, sus tiempos, y leyendo sus curriculums. Era costumbre que el atleta figurase de manera solemne, permaneciendo en un estado de concentración en el cual cada uno templaba sus nervios, y se preparaba para aquello que no hay preparación alguna, estar sereno y tranquilo ante el disparo de salida. De cara al espectador, ese momento de tensión se contagiaba, llegando a hacer de ese instante un tedio. Ahora bien, ese hombre apodado el relámpago, antes de ridiculizar los registros de todos los cronómetros, era ya conocido por sus juegos ante la cámara. Para muchos era una señal de desprecio hacia sus compañeros, un gesto arrogante que muchos críticos han querido buscar las vueltas. Sin embargo quien haya visto cualquier final de velocidad de Berlín, con BOLT o sin él, queda claro que el “relámpago” ha creado escuela. Y que ese tedioso instante antes del pistoletazo de salida, se ha convertido en una sucesión de juegos, muecas, desafíos y demás guiños de los atletas hacia la cámara.
Una moda? No, tiene su explicación y BOLT ha dado muestra de su eficacia. De lo contrario puedes prepararte y meterte en la carrera entes de tiempo, concentrarte para en cuanto escuches el disparo salir lanzado como un cohete. Esa concentración, a menos que hablemos de niveles meditativos, puede ser contraproducente, ya que te genera tensión antes de tiempo. Esa tensión crea rigidez, y el músculo es menos explosivo. Ya que tiene que romper esa rigidez, para poder contraerse con rapidez. Bajo las enseñanzas de BOLT, en principio no tienes que concentrarte para nada ya que durante mucho tiempo te has entrenado para ello, así qué mejor actitud que relajarte totalmente, en cuerpo y mente, soltarse totalmente y sobre todo, divertirse. El mismo lo dice una y otra vez, le encanta correr y competir, disfruta con ello, y nosotros con el.
Otro tema más comprometido, sobre la legalidad de sus record, dopaje si o no… Bien, hablando de un atleta que con 15 años corría los 200m en 20.58s. Yo creo que es legal, al menos tanto como el resto de atletas que coinciden con él en un evento de atletismo. Por que dudar de algo que hace con tanta naturalidad, dentro y fuera de la pista deslumbra la sencillez con que se muestra. Y en dos años ha ganado a los cronómetros y ha conquistado a los aficionados del atletismo con una simpatía encantadora, y una forma de correr que va a traer muchos seguidores. Y como decía en mi articulo anterior, todo por dedicarse a correr, y a correr bien, en lugar de preparar las carreras dentro de un gimnasio.
Que se convierta en leyenda, como el desea, porque así nos hará disfrutar a todos durante bastantes años más, y que se anime con nuevos retos como ha dejado caer, y quien sabe si pulveriza también los 400m o el salto de Longitud. Y así dentro de unos años titule mi artículo de turno: USAIN BOLT, LA LEYENDA.